En la orilla

En la orilla

Veo el verano en tu piel,
las marcas del sol,
las palabras del agua deslizándose sobre tu pelo.

A veces, lo dejas caer,
como si solo fuesen palabras:
«prefiero el invierno al verano,
los perfumes frescos,
el café solo y las puestas de sol».

Tú, espontánea y de pasos firmes,
queriendo averiguar
qué poemas tengo en la cabeza.

No puedo enseñártelos.
«Salen solos»., te digo.

Y, ahora, lo admito: no tengo poemas porque
vivo el presente,
pero puedo acompañarte, cada día,
a mojarnos juntos en la orilla.

Carlos Gómez B.


*Ilustración de Raphäelle Martin.